Julio Perea Racedo sufrió un fuerte vuelco el fin de semana pasado en el Rally de Fernández, fecha por el Campeonato Santiagueño, del cual por suerte sólo hubo que lamentar daños materiales. Pero como en todo vuelco o accidente en un auto que va a mucha velocidad, hay que esperar unos cuantos días para recuperarse del todo.
Hablamos con Julio para saber cómo está él y también su navegante Agustín Muro después del fuerte golpe.
-¿Cómo se encuentran?
-Por suerte bien, sólo con algún dolor en los hombros por el Hans y un poco también en la mano derecha. Sólo fueron golpes, sin consecuencias. Mi navegante Agustín tenía dolores en el pecho, así que se hizo una placa, que salió bien. Son los dolores típicos después de ese tipo de piña.
-¿Cómo fue el despiste?
-Me picó la parte trasera del auto. En un guadal había algo así como una vizcachera, pegó ahí el coche y no lo pude dominar. Nos fuimos al canal, donde caímos de trompa. Se trata de una parte donde se va muy fuerte. En la anterior pasada por el mismo lugar no tuvimos problemas, pero en la siguiente ya veníamos más fuerte y saltamos el lomo que está antes, caímos más lejos y justo donde el piso estaba roto. Venía muy concentrado, pero no pude hacer nada. Después pasaron varios competidores, a quienes también se les movió el auto, pero salieron adelante. Esta vez nos tocó a nosotros.
-¿Cómo quedó el auto?
-Ya está en el chapista, sólo sufrió la chapa, todas las medidas están bien. Las suspensiones sí se destrozaron, pero ya estaba previsto un cambio por unas nuevas para la próxima. Ya las tengo para ponerlas. Vamos a aprovechar ahora para hacerlo Power, vamos a poner todo el frente como el modelo nuevo. Con esto me da una mano Marcelo Valberdi, que ya me consiguió todas las partes. Desde el lunes que viene armando todo.
-A pensar en la próxima…
-Sí, fue una “bomba” grande, pero los autos están hechos para ir a correr y los riesgos siempre están. Ahora nos tocó a nosotros y por suerte lo estoy contando. Por eso siempre es muy importante la parte seguridad, tanto del piloto, el navegante, como del auto.