“Ya vendrán las buenas. Ahora hay que resetear y prepararnos para lo que viene. Siempre se saca algo positivo de todo”. La frase que dijo Franco Colapinto denota lo mal que le fue en su incursión por el circuito belga de Spa Francorchamps. El bonaerense apenas pudo hacer media vuelta en la final de la F-2.
“Son tres carreras en las que no sumé puntos y siento que son cosas fuera de mi control. Es una lástima porque estábamos en un momento para pelear por el campeonato, y ahora parece que se desmorona todo. No llegan las carreras buenas, cuando siento que estoy haciendo las cosas bien, lo cual es muy frustrante”, agregó Franco.
El argentino, con un Dallara del equipo MP Motorsport, en lo poco que corrió había logrado superar a dos rivales, largando desde el puesto 7. Imprevistamente el auto se quedó sin potencia en plena recta de Kemmel y se detuvo. “Tenemos un problema con un sensor cuando se sobrecalienta el motor en las largadas; se rompe cada dos por tres. Les pasó a varios pilotos en la temporada. Ojalá se pueda solucionar y me lo cambien para Monza”, aclaró el corredor, que había sido 8° en el Sprint del sábado.
Isack Hadjar (Campos Racing) consiguió en Bélgica por cuarta vez en el año un triunfo. Fue escoltado por Gabriel Bortoleto (Invicta Racing) y por Jak Crawford (DAMS).
Hadjar suma ahora 165 puntos en el certamen, escoltado por Bortoleto a 36 y por Paul Aron a 41. Colapinto se ubica sexto a 69 unidades.
La próxima carrera se hará en el circuito italiano de Monza (fecha 11) entre el 30 de agosto y 1º de septiembre.