Fue en 2004 cuando Roberto Sánchez, después de haber ganado el año anterior su sexto título a nivel nacional en el rally, decidió cambiar de aires y volver a la Clase 3 del Turismo Nacional. En sus comienzos en el automovilismo nacional había conseguido un triunfo en el autódromo de Buenos Aires. El equipo elegido fue el DTA, dirigido por Ulises Armelini. El auto fue un Chevrolet Astra GSI, compartiendo equipo con Claudio Menzi.
Fueron siete las carreras corridas en ese lapso y su mejor puesto, en una final, fue décimo, en el autódromo de Paraná, Entre Ríos.