Los que se despidieron en 2024 permanecen en el recuerdo

A esta altura de un año, suelen hacerse balances y afloran los recuerdos. El de aquellos que se han ido es tal vez el más emotivo. Motorplus Tucumán recupera para la memoria en esta nota a los nombres y apellidos de aquellos integrantes de la familia de los motores que fallecieron durante el año.

En enero y durante el desarrollo del Rally Dakar en Arabia Saudita, falleció el español Carles Falcon, a consecuencia del paro cardiorrespiratorio provocado por una caída en su moto en la etapa 2.

En marzo, golpeó muy fuerte el adiós de Carlos Pastoriza Ferro, piloto, dirigente y organizador que se había convertido en un referente del deporte motor en dos ruedas. En el enduro y el motocross tucumano y de la región sumó mucho y cosechó cientos de amigos.

En abril, el que nos dejó fue Nicolás Ianiero, reconocido piloto del rally tucumano que ganó carrera y ofreció espectáculo. Tenía 47 años.

En mayo se vivió un duro momento por el fallecimiento de Juan María Traverso, un prócer del automovilismo argentino, que había hecho grandes relaciones con tucumanos, incluyendo al recordado Nasif Estéfano. Su adiós llegó el sábado 11, a los 73 años, en su domicilio de Ramallo. 

También en mayo, el ambiente del enduro tucumano se sumió en la tristeza por la muerte de Sarita, la mujer que cobijó durante años a los pilotos en su casa de la zona de La Sala.

En junio se dio el inesperado adiós de David Marcelo Ibáñez, que supo ser navegante del rally en certámenes regionales. Tenía 51 años, era oriundo de Juan Bautista Alberdi y falleció a consecuencia de un accidente de moto en la nueva traza de la ruta nacional 38, a la altura de Villa Belgrano.

También en junio hubo consternación por la desaparición física del niño piloto de motos Lorenzo Somaschini, de sólo 9 años. El pequeño falleció en San Pablo (Brasil), en cuyo autódromo sufrió un fatal accidente durante un entrenamiento.

En septiembre, la conmoción por la muerte del navegante Nicolás García fue honda. El cordobés que acompañó mucho tiempo a Gerónimo Padilla en desafíos del rally de todo tipo, tenía apenas 43 años. Había empezado a navegar en 1999 y a lo largo de los años se hizo de un bien ganado prestigio en el ambiente. Con Tucumán mantuvo estrechos lazos.

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