Están a punto de vivir quizás la mayor aventura de su corta trayectoria como pilotos de cuatriciclos. En algunas horas, Gastón y Franco Luque saldrán a disputar las finales del Campeonato Nacional de EE.UU en Hurricane Mills,Tennessee, en la mítica competencia Loretta Lynn Ranch. En la foto, ambos están acompañados por el cordobés Catriel Altamirano (primero desde la izquierda), que también será de la partida.
Según describió Eduardo, el papá, la llegada a la sede de la competencia fue con algunas peripecias. Por ejemplo, hubo demoras en afán de aprender cómo funcionaba la heladera y la cocina del motorhome que se alquiló. En total, se hiceron 1.650 kilómetros entre Miami y Tennessee. “Nos turnábamos dos para manejar y domir, pero el que no pudo hacerlo fue Franco, porque era quien manejaba el GPS.
El circuito se dejó ver, de entrada, como muy difícil. “Es muy duro, pero a medida que íbamos andando, las cosas se hicieron más sencillas. Dificulta el hecho de no conocer la pista y el no tener el ‘cuatri’ nuestro. Igual, los que manejamos son muy buenos. Los saltos no son tan complicados. El piso se rompe mucho y no lo arreglan”, contó Gastón, que en uno de los entrenamientos se dio un golpe en la muñeca, por lo que tuvo que aplicarse hielo y tomar analgésicos.
“El espectáculo es tremendo, imposible casi de dimensionar. El circuito se rompe mucho y se pone peligroso”, contó Franco.
Gastón correrá en la categoría “Youth All Star” y “Schoolboy”, y Franco lo hará en la Open C y 450cc. Son más o menos 30 pilotos en el partidos, por categorías. Se calcula que habrá unos 500 “cuatris” en carrera.