Quienes siguieron a Juan Lara en su campaña en el motociclismo y en el automovilismo saben bien todo lo que hizo y aportó en ambas disciplinas. Por eso, su partida (venía sufriendo problemas de salud desde hace tiempo) se sintió fuerte en el ambiente. Al respecto, las redes sociales se llenaron de mensajes de parte de quienes, de una forma u otra, aprendieron de él, o trabajaron con él.
Hijo del recordado “Ñato” Lara, Juan incursionó en las carreras de motos allá por los 70 y los 80. Muchos recuerdan sus duelos con otros grandes de la especialidad, como Valentín “Tin” Noguera y Distaulo. Se destacó en distintas pistas, logró muchos triunfos e hizo del taller de la calle San Juan un lugar frecuentado por el ambiente de las dos ruedas.
Con el tiempo desembarcó en el automovilismo y se hizo notar en la categoría de los Fiat 600. Por aquellos días, su hijo Juan también empezó a correr. Después llegó el momento de instalarse en el karting, como preparador y tuvo bajo su estructura a corredores jóvenes. Varios de los pilotos que alguna vez se relacionaron con él lo recordaron con cariño en las redes sociales.