Siempre es grato encontrarse con Juan Carlos Biazzo,. Con él se puede charlar de parte de la historia de nuestro automovilismo, pero también se puede hablar del presente. Con seguridad podemos decir que ningún otro piloto tiene la cantidad de años corriendo en el autocross.
– ¿Hace cuánto que corrés?
– Ya son casi 30 años.
– ¿Sólo en autocross?
– Sí, es la única categoría en la que puedo correr. Si bien es costoso, el autocross está dentro de mis posibilidades.
– ¿Cómo y cuándo comenzaste?
– Todo comenzó en el taller de “Yiyo” Chincarini. Fue un año en el que Marcos Núñez tenía en reparación su auto y corrió con uno que tenía “Yiyo”. Cuando arregló el suyo, con el que corría quedó en el taller y “Yiyo” me preguntó si me animaba a correrlo. Así comenzó todo. Tenía 18 años.
– ¿Había rivales de peso en esa época?
– Sí, imaginate: Humberto Fortino, Marcos Núñez, Juan Carlos Loretto, sólo por nombrar algunos de los que estaban. Había muchos más y todos buenos pilotos.
– ¿Cómo fue el comienzo?
– Antes, nunca había subido a nada. Me costó un par de años de aprendizaje comenzar a pelear adelante. Después vino otra camada, El “Turco” Hussem, Juan Cornaglia, Juan Gil, “Lalo” Antúnez, Roberto Castro. Ya más cercano en el tiempo, Scalora, los Pintos, Juan José Gil De Marchi, Pablo Morán. La verdad que pasaron muchos, hoy estoy corriendo con el sobrino y el hijo de Hussem y varios chicos más.
– ¿Cuándo fue tu primer triunfo?
– Fue en La Reducción, año 1994 creo. En esa época se corrían tres carreras y el ganador salía por la suma de puntos. Recuerdo que la pelea fue con Juan Gil, que ahora es dirigente.
– ¿Todavía no lograste el campeonato?
– No, es una materia pendiente, por supuesto que voy a seguir peleando por conseguirlo. Tengo seis subcampeonatos. Como cargada me dicen que soy el Reutemann del autocross.
– ¿Cómo te sentís corriendo?
– Muy bien, soy un agradecido de poder haber corrido todos estos años. Pasé muy buenos momentos dentro de la categoría, hice muchos amigos. Recuerdo un año que llegué a la última carrera en Monteros con posibilidades de salir campeón, mi rival era Cornaglia. Yo me fui el sábado y pasé todo el día probando con él y mi auto durmió en su taller. Al otro día definimos el campeonato sin ningún problema. Hoy, el solo hecho de estar, para mí es mucho.
– ¿Hubo una época en la que hacías el cronometraje en las carreras?
– Sí, la Federación compró un sistema de cronometraje, que era único en el NOA, y formamos un grupo con Juan Carranza, Guillermo Gómez López, Mercedes Pucci y Fátima de Núñez, con el cual cronometrábamos las carreras de pista, en todo el NOA. En esa época estaban el TC 1.500 y la Fórmula 4, con eso estuve como siete años.
– También practicás tiro, ¿cómo llegaste a eso?
– Tengo un grupo de amigos. Salíamos a cazar. Un día se presentó la oportunidad de entrar en un torneo, lo hicimos, fue hace cuatro años y desde ahí no lo dejamos. Es un hobby que no me lleva mucho tiempo y es bastante accesible en lo económico.
– ¿Cuál es tu especialidad?
– Con escopeta, tiro a la hélice. Hay cinco máquinas, de cualquiera puede salir una hélice y hay que pegarle.
– ¿Cómo se compite?
– Se hace un campeonato tucumano de 8 fechas. También hay un torneo regional, que clasifica para un Argentino, del cual participé el año pasado y fui subcampeón. Como todo, lleva su tiempo y entrenamiento.
– ¿Hacés los dos campeonatos este año?
– Con el tiro seguro, voy a tratar de organizarme para poder hacer también autocross.
– ¿No estás solo en todo esto?
– No, hay mucha gente a la que le tengo que agradecer, principalmente a mi familia. Me bancan todo y son mi apoyo. Al “Turco” Huseem, en el taller de él hacemos el auto, todo a pulmón; a “Yiyo” y “Seba” Chincarini, que me dan una gran mano con el motor.
Pasaron muchos años y esperamos verlo a Biazzo muchos años más por los circuitos tucumanos.