
El tradicional aperitivo del Dakar se sirvió entre miles de paraguayos en la costanera de Asunción. La edición 2017, en el primer día del año, se puso en marcha con la largada simbólica. Salvo la jornada del domingo 8, en La Paz (Bolivia), donde habrá descanso, todas las demás hasta el sábado 16, serán de competencia.
Luego de las verificaciones técnicas y administrativas, quedaron habilitadas para correr 144 motos, 37 cuatriciclos, 87 coches y 50 camiones.
Una multitud se acercó a la rampa de salida para saludar a los competidores. La jornada fue agobiante por lo climático y generó algún temor por la lluvia que se registró en algunos momentos del día (incluso algunos participantes probaron sus vehículos en zonas empantanadas y tuvieron problemas). Sin embargo, los 318 vehículos participantes pudieron estar en la ceremonia sin problemas. La largada contó con la presencia de los presidentes de Paraguay, Horacio Cartes Jara, y de Bolivia, Evo Morales Ayma.
Lo por venir, 39 kilómetros de competencia desde la localidad paraguaya de Atyra hasta Resistencia (Chaco) previstos para el lunes 2 tuvieron una muy intensa previa. Es que fue tal el desplazamiento de espectadores (se estiman unos 100.000), que las autoridades llegaron a dudar sobre la seguridad del tramo. Finalmente, llegó la frase “puedo garantizar que se corre”, formulada por Carlos Villate, del Centro Paraguayo de Volantes. Otro dato sorprende: hay gente acampando en las zonas de público desde el sábado 31 de diciembre. Y serán 750 los policías incorporados al plan de seguridad. Las autoridades dieron a conocer carteles con medidas preventivas, escritos en español y en guaraní.
“La cantidad de gente que hay en el tramo es algo nunca visto, nos sorprende, pero no nos asusta”, agregó Villate.