Cuando los roles cambian, pero la pasión sigue intacta

Cómo se pasa de un momento a otro. Fue un proceso largo, pero hoy parece que todo ocurrió en un instante. Ahora podemos hablar de esa transición: de papá piloto y su hijo, su primer hincha, a hijo piloto y papá, su primer hincha.

Sí, estamos hablando de los Scalora: Fabián, el padre, y Tadeo, el hijo. Esta nota surge a partir de una foto publicada por Tadeo, en la que muestra un saludo y la felicidad de aquellos momentos en tantas carreras junto a Fabián, recuerdos que quedaron plasmados en imágenes de aquella época.

Hoy, la situación se ha invertido: ahora es Fabián quien lo saluda antes de largar y quien lo espera al final para felicitarlo y celebrar con él.

Para quienes fuimos testigos de este proceso, parece que todo pasó en un abrir y cerrar de ojos, pero en realidad fueron muchos años entre un momento y otro.

Les preguntamos a ambos qué sentían al ver esas fotos, y esto fue lo que nos dijeron:

Fabián: “Esas fotos muestran la pasión que tenía desde chiquito, lo que sufría, vibraba y me acompañaba hasta la salida del parque de asistencia. Corría detrás del auto hasta que marcaba tarjeta y me iba. Lo veía disfrutar, sufrir y recibir el cariño de la gente, aun siendo tan pequeño. Hoy es prácticamente lo mismo, con la diferencia de que ahora tiene una tranquilidad para correr que es admirable. Desde entonces, supe que su camino era ser piloto. Pero, por encima de todo, es un buen chico, respetuoso y humilde. No se puede pedir más. Los resultados deportivos son solo una circunstancia. Creo que esa foto lo dice todo. Es un orgullo para mí, como lo son mis otros hijos, cada uno con sus virtudes y defectos.”

Tadeo: “No recuerdo exactamente qué pensaba en el momento de la foto, pero por lo que muestra, seguramente era felicidad. Desde que tengo uso de razón, admiraba a mi viejo, lo miraba y me imaginaba como piloto. Lo saludaba cuando se iba a una prueba y lo esperaba siempre al final para recibirlo. Siempre quise estar arriba de un auto de carreras y, por suerte, mi viejo me dio la oportunidad.”

Una historia de vida que, sin duda, tendrá muchos capítulos más…

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