Distendidos, optimistas, ansiosos, motivados, confiados pero en alerta, ilusionados. Muchos adjetivos inundan la previa del Neme Racing Team, con el Rally Dakar a la vista. Falta poco, muy poco, para que la Toyota SW4 que Ricardo Neme manejará y el puntano Ramiro Corvalán navegará, pase por la rampa de salida en Lima. Después, habrá que hacer un largo camino a Pisco, donde la edición N°40 del desafío extremo tendrá un prólogo el sábado por la tarde.
“Ricky” y Ramiro pasaron buena parte de la mañana del viernes, y también la siesta, haciendo los últimos aprestos camino a la competencia. Permanecieron en el hotel limeño donde están alojados, poniendo en orden las valijas (antes de ello, se probaron los buzos y cascos de competencia), charlando sobre lo por venir y también mirando las distintas transmisiones televisivas para estar al tanto de cada acontecimiento. Posteriormente, fueron al vivac de El Pentagonito, donde volvieron a hacer contacto con el resto de los miembros del equipo, Ariel Isola, Juan Manuel Nicola y Marcos Acosta. En tanto, como dentro del vivac hay una gomería completa de la marca que porta la camioneta (que como se sabe, ya está en parque cerrado), les armaron los neumáticos sin cargo por ser usuarios.
En otro orden, durante el viernes finalizaron en la base aérea de Las Palmas las verificaciones técnicas de los vehículos.
La etapa 1 unirá Lima (salida de la primera moto, a las 9.45, del primer auto 12.05 y del primer camión 13.34) con Pisco (inicio de carrera a las 14, 16.20 y 17.49); tendrá un total de 272 kilómetros de enlace y 31 de especial cronometrado. El final del día para el primer vehículo en carrera (según orden ya señalado) se prevé a las 14.50, 16.46 y 18.17). El del sábado pero el primero de los cinco días de competencia en las arenas de Perú.