
Ya pasaron tres meses desde que Gustavo Nazar sufrió un grave accidente y continúa con una lenta recuperación, acompañado por su familia y por mucha gente que estuvo —y sigue estando— a su lado brindándole apoyo.
Recordemos que Gustavo tuvo un fuerte choque cuando bajaba en bicicleta desde San Javier y una camioneta se cruzó en su carril.
Hablamos con Gustavo.
¿Te acordás cómo fue el accidente?
—No, nada. Fue imposible esquivarla. Le pegué en la caja, con la espalda, según me contó Franco Salvatierra, que venía conmigo. Perdí el conocimiento y recién me desperté cuando ya estaba internado.
¿Qué lesiones tuviste?
—Me quebré la columna en distintos lugares, la cervical y algunas vértebras.
¿No te podés mover?
—No, no puedo hacer ningún esfuerzo. Estoy prácticamente inmovilizado desde el accidente. Me quebré tres vértebras: una fue operada y las otras tienen que soldar solas. Recién hace algunos días estoy caminando un poco cada día, nada más. El proceso es muy lento, seguro seis meses como mínimo, de acuerdo a cómo vaya evolucionando. Estoy en constante tratamiento médico y son ellos quienes me van indicando cómo seguir.
¿Cómo lo sobrellevás?
—Con mucha ayuda de mucha gente. Toda mi familia, mi señora, mi hija y mi mamá están incondicionalmente. Mi hermano (Franco) y mi papá (Carlos) me están dando una gran mano en lo laboral, porque yo no puedo hacer nada. Seguro me voy a olvidar de alguno, pero me ayudaron muchísimo: Franquito Salvatierra, Ariel Mónaco, Ernesto Lord, Javier Cevallo, Cucu Svesliza, Horacio De Grandi, Manuel Flores, Sebastián Chincarini, el Dr. Daniel, amigo de las bicis… Muchísima gente estuvo y está pendiente, apoyándome.
¿Cómo sigue el tratamiento?
—Tengo que esperar el tiempo necesario para que las vértebras suelden solas. Periódicamente me están haciendo resonancias para ver si el proceso va bien.
Debe ser difícil para vos estar quieto…
—Imaginate. Este año estaba compitiendo mucho en bici y también corrí con el auto en Catamarca. Pero no queda otra que esperar y recuperarme. De ahí, y según las secuelas que queden, los médicos me dirán qué puedo hacer. Espero quedar bien y poder seguir haciendo lo que tanto me gusta.



grande Gustavito pocas personas pueden contar lo q te paso un abrazo sobrinoquerido