Desde el puesto 14 sin escalas y con un dominio aplastante. Así fue lo que hizo el neerlandés Max Verstappen con su Red Bull en el GP de Bélgica, que se desarrolló en el bello circuito de Spa Francorchamps.
El comienzo de la segunda parte de la campaña de la F-1 fue inmejorable para Verstappen y para Red Bull. De hecho, el equipo hizo el 1-2 dado que el mexicano Sergio Pérez ocupó el segundo escalón del podio.
Tras cambiar elementos en el motor de su coche, Verstappen tuvo que salir desde el puesto 14 de la parrilla. Lo que hizo fue un show espectacular, y cruzó la bandera a cuadros con una ventaja de más de 17 segundos sobre “Checo”.
Ni los corredores de Ferrari, ni los de Mercedes pudieron hacer algo sobre sus rivales de la escudería austríaca, todo lo contrario: se agrandó el dominio de la casa austríaca.
En la largada salió bien el español Carlos Sainz (Jr), tras conseguir la pole el sábado con su Ferrari. Pérez se quedó atrás con Fernando Alonso (Alpine) y Lewis Hamilton (Mercedes) siguiéndolo. Pero la pelea entre los dos ex campeones del mundo no terminó del todo bien: se tocaron en la curva 7-8 cuando el británico intentaba superar al español. Hamilton se vio obligado a abandonar por los daños en su monoplaza.
En esa instancia es que comenzó la remontada de Verstappen. Cuando ya estuvo en la zona de pelea por la punta, los problemas de Ferrari le allanaron el objetivo. Los italianos tuvieron una nueva jornada para el olvido, con decisiones inexplicables de estrategia y un rendimiento pobre en sus autos. Finalmente, Sainz acabó tercero y Charles Leclerc, sexto (fue penalizado por exceso de velocidad en boxes).
Con este resultado, Verstappen llevó a 93 unidades su ventaja en el Mundial de Pilotos (lo sigue “Checo”). Leclerc está 3°, a 98.
En Constructores Red Bull, con su cuarto 1-2, estiró su claro dominio en el campeonato.
La fecha 15 del certamen se concretará el domingo 4 de septiembre, en el clásico circuito de Zandvoort.