
Estrategia pura, manejo pulido, ansias de victoria permanente. Así puede resumirse lo que hizo Lewis Hamilton (Mercedes) en Montmeló, donde la F-1 concretó su fecha 4. El británico se jugó por las dos paradas de boxes, y se salió a la perfección. Así, pudo batir al neerlandés Max Verstappen (Red Bull), que dominó buena parte de la carrera. Completó el podio el otro piloto de Mercedes, el finés Valtteri Bottas.
Verstappen se quitó la vanguardia a Hamilton en la largada. Desde allí, lo del británico fue mantenerse en el segundo lugar, y un acecho incipiente sobre la posición del neerlandés. Este paró a repostar en boxes en el giro 24. Hamilton quedó al frente, escoltado por Charles Leclerc (Ferrari). Pero ambos pararon en la vuelta 29 y otra vez el piloto de Red Bull pasó a dominar.
A poco de atacar varias veces la posición de Verstappen, Hamilton se fue a boxes en el giro 44. Puso neumáticos intermedios en su coche y regresó a la pista 3°, detrás de Bottas. Pronto lo superó y fue por el neerlandés. A seis giros del final, consiguió situarse en la punta.
Con esta nueva victoria, Hamilton igualó a Michael Schumacher como los máximos ganadores del GP de España, con seis triunfos. Además, llegó a los 98 festejos en la máxima categoría.
Hamilton se mantiene al mando del certamen, con 94 puntos. Lo siguen Verstappen (con 80) y Bottas (con 48).
La próxima carrera se concretará el 23 de mayo en las calles de Montecarlo.