
La caída de Francesco Bagnaia le dejó el triunfo en las manos a Maverick Viñales en el GP de Emilia Romagna, correspondiente al séptimo compromiso del año del MotoGP.
El incidente del piloto italiano le quitó las posibilidades de cerrar de forma positiva la valiosa tarea que venía haciendo en el circuito de Misano, donde se había apoderado de la punta en los primeros metros y había logrado una buena diferencia con el pasar de las vueltas.
El español, a bordo de la Yamaha, heredó el liderazgo tras el percance y no dudó en convertirlo en su primer éxito de la temporada, octavo de su trayectoria en la categoría. Detrás suyo arribaron Joan Mir, con la Suzuki, y Pol Espargaró, con la KTM.
De esta manera, Viñales comparte ahora con Fabio Quartararo (4° luego de una penalización) la posición de escolta en el campeonato, a una unidad de Andrea Dovizioso (8° con la Ducati), quien comanda la tabla con 84 puntos.
El próximo desafío será dentro de una semana, en el circuito de Barcelona, por el Gran Premio de Cataluña.