“Pienso que no es esta la carrera en la que hay que salir a atacar con todo, sino en las cuatro que restan para el final del campeonato. No hay que perdonar nada, ni regalar.” Con una fuerte convicción viajó Pablo Ortega hacia Río Negro. Lo hizo por vía aérea en compañía de sus hermanos Juan y Bernardo, que también estarán en pista desde el viernes, cuando la Clase 2 del Turismo Nacional salga al trazado de Viedma.
“Pabloso”, 4° en el certamen y uno de los pilotos que se perfila en el pelotón de los definirán el título, siente que hay buenos indicios previos. “En 2016 en esa pista me fue bien. El Fiat Palio que maneja está muy bien y las chances propias mejoraron luego de que, por reglamento se les bajó la potencia a los Renault Clio y a los Chevrolet Corsa. Igual, no hay que salir a hacer la gloriosa, sino a hacer una tarea tranquila”, contó.
El piloto consideró que, de mínima, en esta prueba le gustaría descontar la mayor cantidad de puntos posible al líder, Alejandro Bucci. “Y, de máxima, pretendo recuperar el segundo lugar del certamen. Estoy en condiciones de pelear por cosas importantes. Además, el equipo trabajó bastante en el auto. Por todo eso es que me siento en positivo, y con muchas ganas”, analizó.
Las actividades en Viedma se inician el viernes, con los entrenamientos libres, previstos de 11.30 a 12.40 y de 13.30 a 14.40. Luego vendrá la clasificación, en grupos, a las 16.10, 16.30 y 16.50.