
Por estas horas, Rodrigo Chanta está viviendo “un sueño”, tal como él lo describió. Es que está en Buenos Aires, participando de un casting del ciclo “Desafío Motor”, es un programa de formación de pilotos, en el cual el ganador, como premio, correrá en la categoría telonera del Súper TC 2000, la Fiat Punto Abarth Competizione.
“Ya finalicé la primera etapa y pienso que me fue muy bien. Sólo quedarán 80 aspirantes para la segunda etapa. Recién en la noche del sábado nos dirán vía mail quiénes quedamos. Yo me tengo fe.”
Más adelante, el piloto de 23 años dijo que se inscribió porque vi la publicidad del evento en Facebook y otras redes sociales. “Me puse a investigar un poco, ver unos capítulos y decidí inscribirme. Y dije ‘esta es mi oportunidad, así que decidí participar. Esto para mí es un sueño, espero que pueda continuar. Estoy viviendo esto con muchos nervios y ansiedad”, aseguró.
Rodrigo comenzó desde chico su pasión por los motores, primero como espectador. En 2012 le tocó vivirlo desde adentro, debutando como navegante en el rally tucumano, junto a su papá. Una carrera después ya se subió junto con su hermano, y de ahí no se bajó más de un auto.
“Lo navegué a mi hermano Alejandro y en 2014 empecé a subirme con otros pilotos, pero siempre de navegante. Probé un par de veces al volante, pero nunca corrí. En tierra me gusta cantar hoja, pero si tengo que pilotar me gusta la pista y ¡el entrevero de autos! Jaja”, aseguró el corredor del barrio Cerro Las Rosas.