Cuando ellos se van a las carreras, algunas de ellas los acompañan. Se involucran desde la preparación del vehículo y luego viajan con ellos; los asisten; les envían ondas positivas desde bien cerquita; les ayudan a hacer más llevadero un fin de semana; se emocionan cuando ven que las cosas están en su lugar, ya por un buen resultado, ya por un alto rendimiento.
Buena parte de ellas se quedan en casa, esperando a sus “chicos”, sufriendo lo indecible, ilusionándose con un buen resultado, aspirando a que nada malo les pase, queriendo volver a tenerlos cerca. Si el resultado acompaña, serán las que den el beso de la victoria, el abrazo del alma. Pero si eso no pasó, si el medio mecánico se rompió, si la bendita suerte estuvo del otro lado, ellas saben que al retorno tendrán que poner la dosis de tranquilidad y paciencia para hacerles el “aguante”.
Las madres de pilotos y navegantes, en suma, todos aquellos que hacen de los deportes mecánicos su gran pasión, saben mejor que nadie de los peligros que enfrentan, de los largos días de ausencia por carreras lejanas, de los presupuestos que no alcanzan.
Motorplus quiere homenajear a las mamás a las que la adrenalina les fluye como si ellas mismas corrieran. Ellas, aunque nadie se los diga, saben que siempre fueron, son y serán parte imprescindible del equipo. A todas, nuestro deseo es que vivan un gran día.
