Hay historias de pasión que se escriben con paciencia. Fue la que Eduardo Lai armó a lo largo de 25 años, hasta que un día pudo darle a ese sentimiento un punto de alta emoción. El propio protagonista lo contó, después de tomar parte del Rally de Lules, por el Campeonato Tucumano, junto con su hijo.
Lai, tucumano residente en Jujuy, siempre estuvo ligado a la parte técnica y de preparación. De allí que su experiencia como piloto sea todo un acontecimiento.
“Estuve 25 años aguantando la pasión, puesta en un freezer por distintos motivos. Hasta que apareció la propuesta del gran ‘Tony’ Salvatierra de cederme su auto ¡y acepte al toque!”, contó.
Lai dijo que fueron “millones de sensaciones encontradas las que sintió en cada metro de competencia”. Y, a continuación, describió cómo fue su carrera.
“En el primer tramo tuvimos un fuera de camino en el que perdimos mucho tiempo, fue por error mío. En el segundo tramo destrozamos una cubierta y en el tercero, inexplicable, lo hicimos ¡casi sin cometer errores!”
Lai admitió además que quedará agradecido de por vida a “Tony” y “Fede” Salvatierra, “porque hicieron que un hombre sea feliz al cederme ese tanque de guerra, al que no hizo falta agregarle ni una gota de agua ni aceite”. Y también agradeció a sus hijos, Josefina y “Alvarito”, a Luciana Inés Galvez Rovelli , a su hermana “Gabi” y a sus amigos que le hicieron el aguante en la asistencia.
Finalmente, el piloto dijo sentirse “muy feliz de haber compartido con vos, Alberto Lai Gálvez semejante fin de semana”.
Fotos tomadas del Facebook de Eduardo Lai.