
Se sabe del interés de las autoridades del Gobierno de Santiago del Estero por traer al autódromo de Las Termas a la segunda mayor categoría mundial de autos monopostos: la IndyCar. En pocas semanas, la intención ofrecerá un mojón. Será cuando el arrecifeño Agustín Canapino se suba a un Chevrolet N°77 con chasis Dallara de la escudería Juncos Hollinger Racing, propiedad de Ricardo Juncos, un bonaerense oriundo de la localidad de San Fernando.
El 9 de noviembre habrá oportunidad de ver en acción en el trazado santiagueño a la máquina. Antes de ello, se la podrá ver como parte del espectáculo preparado por el Turismo Nacional para la “Carrera de los 200 pilotos”, prevista del 4 al 6 de noviembre en e l autódromo “Oscar y Juan Gálvez, de Buenos Aires. Se quebrará así una espera de 51 años para volver a ver en territorio argentino un bólido de la categoría.
La IndyCar empezó su larga historia en 1911. Es la más longeva del mundo. Corrió sólo una vez en la Argentina. Fue el 28 de febrero de 1971 con las “300 Millas de Rafaela”. Fue la primera vez que la categoría estadounidense tuvo una fecha puntuable fuera de su país. El único argentino que corrió fue el recientemente fallecido Carlos Alberto Pairetti, que culminó 9° por suma de tiempos.
Como parte de su preparación para las pruebas en Argentina, Canapino participará de una prueba comunitaria en Sebring, el 12 de octubre. No es nuevo en la categoría, ya que corrió para el equipo de Juncos en las “24 Horas de Daytona” en enero de 2019 con un prototipo Cadillac. Terminó 30°.
La Juncos Hollinger Racing es una escudería que participa en diversas categorías en Norteamérica. Empezó en el estado de Florida, con el karting. Su siguiente paso fue llegar a la IndyCar, sus categorías menores: Indy Pro 2000 e Indy Lights. Con el tiempo se trasladó a Indianápolis y dio el salto a la IndyCar. Debutó en las 500 Millas de Indianápolis de 2017. Tras la asociación de Juncos con Brad Hollinger, el team regresó en 2021. Ya en esta temporada, participa de forma completa con el piloto inglés Callum Ilott.
La idea santiagueña de traer la IndyCar tiene un plan para el cual ya se dieron algunos pasos. El gobernador Gerardo Zamora presenció las “500 Millas de Indianápolis”, el año pasado. En la oportunidad, se reunió con su par del estado de Indiana, Eric Holcomb. El encuentro fue promovido por Juncos.
No se conocen datos de cuánto cuesta un espectáculo de la categoría. Más porque está sin competir fuera de Norteamérica (en su momento corrió en Japón, Brasil, Australia y México). Como referencia sirve este dato: el propio Juncos intentó en 2018 que San Juan y su autódromo El Villucum la reciba. En aquel momento se habló de 5,5 millones de dólares por año, en un contrato por tres temporadas. El monto incluía los derechos de retransmisión televisiva a nivel local en la temporada previa y durante la extensión del contrato. También la difusión del turismo argentino en el marco de las 500 Millas de Indianápolis. Un plus: por U$S 500.000 adicionales se aseguraba la presencia de un argentino.