En los últimos años resultó complicado prever un calendario automovilístico para Tucumán. No sucedió lo mismo con categorías de motociclismo, como el enduro. De todos modos, ambas disciplinas están por estos días con un panorama que no escapa a la común situación que se vive en todo el país. Es decir, cuesta imaginarse una programación lógica de carreras, cuando la pandemia se mantiene como un latente enemigo que hace cambiar planes a corto y mediano plazo.
Sin ir más lejos, está el caso del motocross, que no podrá hacer su Torneo de Verano en Tafí del Valle, debido a la incertidumbre imperante en Tucumán en materia sanitaria. Tampoco el karting de tierra podrá responder a una invitación que le hicieron desde Guayamba (Catamarca), debido al alerta amarillo que se impuso en esa provincia. El autocross, en tanto, también invitado por dirigentes catamarqueños, ya recibió la notificación de suspensión de actividades.
Si ya en enero asoman estas cancelaciones, es de suponer que lo que viene puede entrar en este paisaje incierto. O no. A esta altura de los hechos, nada es seguro, como tampoco nada se descarta.
Hay gestiones, como las efectuadas por las autoridades de la Federación Tucumana de Automovilismo Deportivo, para que se autorice el regreso de las carreras. Pero por el momento no hay avances.
Hay planes, como el del enduro, de hacer correr una primera edición del Rally Transmontaña en Semana Santa, mientras sus autoridades no prevén de momento anunciar un calendario provincial.
Hay planes también del motocross del NOA, de empezar lo más pronto posible su campeonato, pero…
Nada será sencillo este año para los calendarios deportivos. Y venimos de un 2020 que resultó una tortura. Habrá que colmarse de paciencia. Y esperar. No queda otra.